Eustrés vs. Distrés: El Estrés Puede Ser Positivo

Cuando pensamos en la palabra estrés, lo primero que nos viene a la mente son sentimientos de angustia, ansiedad o agotamiento. Pero, ¿sabías que no todo estrés es malo? Hay dos tipos principales: el eustrés, qué es el estrés positivo, y el distrés, que puede ser perjudicial para nuestra salud. Entender la diferencia entre ambos puede ayudarte a manejarlo mejor y, en consecuencia, a mejorar tu calidad de vida.

Estrés

¿Qué es el Eustrés?

El eustés es un tipo de estrés que nos impulsa de manera positiva. Es una respuesta saludable de nuestro cuerpo ante desafíos que nos llenan de entusiasmo y motivación. Se presenta en momentos emocionantes, como cuando empezamos un nuevo trabajo, nos preparamos para una presentación importante o nos enfrentamos a un reto personal.

Este tipo de estrés activa nuestros sentidos, mejora nuestra concentración y fomenta nuestro crecimiento personal. Además, puede aumentar nuestra resiliencia, confianza y productividad. Sin embargo, incluso el eustrés necesita ser gestionado adecuadamente para que no se convierta en distrés.

Algunos ejemplos comunes de eustrés son:

  • Iniciar una relación o matrimonio
  • Participar en una competencia
  • Cambiar de trabajo o recibir un ascenso
  • Enfrentar un nuevo proyecto con entusiasmo.

¿Qué es el Distrés?

Distrés

El distrés es el estrés negativo, y es el que más conocemos. Aparece en situaciones de gran presión, conflicto o incertidumbre. Este tipo de estrés es el que más impacta nuestra salud física y mental, especialmente cuando se vuelve crónico.

El distrés puede causar problemas como:

  • Ansiedad y depresión
  • Insomnio o fatiga crónica
  • Enfermedades cardiovasculares
  • Problemas en el sistema inmunológico
  • Bajo rendimiento y dificultades cognitivas

También se relaciona con emociones negativas como la ira, la tristeza y la frustración, lo que afecta nuestra calidad de vida.

Cómo Gestionar el Estrés de Forma Eficaz

Estrés

Tanto el estrés como el distrés necesitan nuestra atención y manejo consciente. Aquí te comparto algunas estrategias efectivas para mantener el equilibrio saludable:

Técnicas para gestionar el estrés:

  • Hacer ejercicio de forma regular
  • Practicar la respiración consciente o la meditación
  • Establecer límites en lo personal y lo laboral
  • Buscar apoyo social y comunicarse de manera efectiva
  • Tomar descansos y desconectarse de lo digital.

Identificar si estás sintiendo eustrés o distrés es el primer paso para elegir las herramientas adecuadas. La clave está en convertir el estrés en un aliado que potencie tu bienestar, en lugar de dejar que te abrume.

El Estrés No Siempre es un Enemigo

Aprender a distinguir entre el eustrés y distrés te da el poder de mejorar tu salud mental y enfrentar los desafíos con una actitud positiva y equilibrada. Manejar el estrés de manera efectiva no sólo optimiza tu rendimiento, sino que también enriquece tu calidad de vida.

¿Estás listo para convertir el estrés en tu aliado? Comparte este artículo y empieza hoy mismo a implementar estas estrategias en tu vida.